lunes, 30 de noviembre de 2009

Vuelo. Vuelo en el viento. Vuelo en el tiempo. Entonces me despierto y me doy vuelta para mirarte. Te observo; me doy cuenta de que ya no estás acá, que tu alma se fue hacia ciertos rincones oscuros que la mía no quiere recorrer. Tal vez por miedo, tal vez porque no quiere seguir tus juegos como siempre lo hace. No, yo no me quiero meter ahí por el simple hecho de que eso está mal. Puede ser que vos también lo estés, pero hace tiempo que no hablamos de verdad. ¿Hablamos de verdad alguna vez? ¿Las personas realmente hablan o sólo se mienten? Nunca me detuve a pensarlo demasiado, a lo mejor éste sea un buen momento. Éste es mi momento, lo sé. Se siente bien y a la vez se siente mal. Es como una alegría dolorosa, o un dolor alegre; me cuesta identificarlo.

Entonces abrís los ojos asustado, como notando mi hostil mirada sobre tu cuerpo. Automáticamente cierro los míos. Puedo sentir cómo me observás; tu lástima lastima. Intentás saber cómo estoy, pero no te animás a preguntar. Ambos sabemos que ya te diste cuenta de que estoy despierta, nunca fui buena disimulando. Entonces ¿de qué sirve seguir fingiendo? Dejo que mis ojos se vayan abriendo de a poco. Todo se congela ese instante en que los dos nos miramos; como si todo lo demás no existiera, como si pudiésemos borrar lo que pasó y lo que logró colocarnos en estos lugares que hoy ocupamos. Pero no queremos hacerlo. No queremos modificar nuestros pensamientos y menos queremos pensar en lo que de ahora en más ocurrirá. No nos importa ni el presente ni el futuro, ya hace bastante que nos quedamos en el pasado.

La aguja del reloj se sigue moviendo y yo sigo esperando a que me rescates. Pero una parte de mí sabe que no lo vas a hacer nunca, y la otra no lo quiere aceptar. Por eso me levanto sin decirte nada y aparto mi vista de la tuya. Se me hace difícil seguir sosteniéndola. Al regresar, noto que estás dado vuelta y que ya no necesitás de mí. Supongo que hace rato alcanzaste esa independencia que yo no puedo encontrar en ninguna tienda. ¿Dónde se compra? ¿Y el olvido, dónde lo consigo?

Nunca más volviste a llamar.




Solci.

7 comentarios:

natal dijo...

Dos frases:
''Si la(o) quieres dejala(o) volar''
''El que se va sin que lo hechen, vuelve sin que lo llamen''.

Y ahora, por si eso te bajonea porque son simple frases de consuelo para abandonadas (frases que a mi tambien me dicen), venga Homero, que lo voy a citar:

''Si alguna vez alguien pudo amarte y te amó, significa que alguien te volverá a amar'' (y despues cae ebrio sobre la barra de Moe)

Vos pensalas, y no seas pelotuda, la vida es tan linda, sino me crees, escuchá ''La Manzana Cromatica Protoplasmatica''. Y si no te alegró la semana, vení y mordeme. Soy pura oidos*

*carne

T.St. dijo...

La hermosa entrada realmente es hermosa. Adoro tus delirios! Gracias por compartirlos ^^

natal dijo...

estaba esperando con tantas ganas tu comentario. que loqura.
y me lo robaron en el reci.


yo muerdo mucho, preguntale a mis ex (cejas cejas).

Fresh dijo...

Cuanta confusión...qué te puedo decir? Que te arriesgues. El mismo consejo le doy a todos y es lo que menos hago yo:| Es taan lindo arriesgarse y no quedarte con las ganas y la inquietud de "QUÉ HUBIERA PASADO SI YO..." es la típica, pero tendría que dejar de serlo. Espero que pasé lo que pasé te vaya bien y si te va mal, seguí buscando otro camino porque si todavía estás viva y Dios o el destino o LO QUE SEA no te sacó la vida, por algo es! Algo te esta esperando, algo todavía te queda por hacer que te mantiene ALIVE. Es lo que generalmente me digo. Te conozco poco, solo por estas entradas que dejas, pero igual siento aprecio por vos y te quiero:) Que estes bien si?:D. Beso.

Fresh dijo...

Obviamente, me encantó tu nueva frase de header♥.

natal dijo...

como andas, sol?

natal dijo...

fue un ataquesito no más.
estoy como nueva.

dale, hablemos:
soyunamagdalena@hotmail.com